
El joven terminó con la nariz lastimada, los dos ojos morados y cuatro puntos en la cabeza
Mario Escalante aseguró que fue víctima de una represión policial por parte de cinco uniformados a la salida de un boliche en Urdinarrain. Por otra parte, uno de los efectivos involucrados en el hecho denunció a Escalante por lesiones leves en la comisaría.Hay dos relatos para el mismo hecho que ocurrió en la madrugada del domingo 15 de julio, que se inició en el interior del boliche La Tienda y luego se trasladó a las calles de Urdinarrain.Por un lado está el relato de la supuesta víctima de una represión policial. Mario Escalante de 30 años contó a elDía que se encontraba en el boliche y "tres flacos de Basavilbaso" lo invitaron a pelear.Este joven, padre de dos niños, reconoció haber estado alcoholizado y según explicó, "un policía me agarró bajando la escalera y me pegó en la nuca, yo me di vuelta y me lo saqué de encima hasta que llegó un segundo policía que me manoteó el brazo y me sacó por la puerta de emergencia, después no me acuerdo de nada".Escalante agregó que una vez que se encontró fuera del inmueble, entre cinco uniformados lo golpearon e incluso le dieron patadas mientras se encontraba en el suelo, que le dejaron la cara destrozada y mucho de esto le fue contado por testigos.Consultado por este hecho el subjefe de la Policía Departamental, comisario Vicente Giménez, aclaró que ya se iniciaron todas las investigaciones al caso pero informó que uno de los efectivos que fue acusado por Escalante ante el Ministerio Público Fiscal, también radicó una denuncia en la Comisaría de Urdinarrain por lesiones leves.El funcionario policial contó que la versión de los efectivos policiales involucrados es que Escalante agredió primero a un Sargento cuando lo retiraba del boliche por una pelea con los "tres flacos de Basavilbaso". "Mientras lo acompañaba a la salida, se safó de la contención policial y le pegó un codazo y una trompada en el ojo al Sargento, por lo cual después hace la denuncia", señaló."Si yo les pegué que me traigan alguna prueba", respondió Escalante sobre lo ocurrido, incluso agregó que "en el hospital me amenazaron los mismos policías para que no dijera nada, estaban esperando que me cosieran para llevarme preso".Giménez aclaró que todos los uniformados que están bajo un sumario administrativo para determinar lo ocurrido, dependen todos de la Comisaría de Urdinarrain. Según lo explicado por estos efectivos, Escalante escapó de los efectivos y ganó la calle por lo cual se lo persiguió con dos móviles policiales hasta que se lo vuelve a encontrar en el Paseo San Martín, ahí también se lo vuelve a reducir utilizando la fuerza física pero nuevamente escapa y se mete en un domicilio de calle Inchauspe al 100.La propietaria de esta vivienda luego denunció que se encontró con Escalante en el interior de su casa, desconociendo los fines. Cuando llega la Policía se lo encuentra encerrado en el baño y manifestó "que no se iba a dejar llevar preso" por lo cual se llamó a una ambulancia que lo trasladó al hospital Manuel Belgrano, donde fue atendido por la médica de guardia Marta Charadía.En el hospital permaneció alrededor de seis horas recuperándose de las lesiones recibidas por los efectivos pero según la Policía, las agresiones fueron producidas durante la pelea con los "tres flacos de Basavilbaso".Luego de su recuperación, Escalante quedó arrestado en la Comisaría de Urdinarrain por una orden judicial y después de unas horas recuperó la libertad. Al día siguiente concurrió a la fiscalía de Lisandro Beherán y realizó la denuncia por apremios ilegales."Lo único que busco es que se haga justicia, no puede ser que anden pegando así, una cosa es que te lleven preso si uno se porta mal y otra distinta es que te hagan esto", manifestó el joven lastimado.El comisario Vicente Giménez informó que "desde la Jefatura Departamental se han dispuesto actuaciones administrativas, una información sumarial, tendiente a determinar y o deslindar la responsabilidad que le pudiere corresponder al personal policial interviniente, dado que la directiva marcada por el Jefe de Policía a todo su personal es del irrestricto respeto por los derechos civiles de cada una de las personas".Por el momento, los efectivos involucrados se encuentran desafectados de la fuerza hasta que finalice el sumario administrativo, que puede durar alrededor de 15 días.