SALVAR UNA VIDA, A MILES DE KILÓMETROS
Una en 40 millones: habló la gualeguaychuense que donará médula ósea a un estadounidense
Florencia tiene 23 años, y si todo sale bien, se convertirá en la heroína de un paciente de Estados Unidos, que estaba esperando el trasplante y resultó compatible con la genética de la joven de nuestra ciudad.
La posibilidad es 1 en 40 millones, y Florencia fue esa mínima esperanza que, si el trasplante es exitoso, le salvará la vida a un norteamericano.
La gualeguaychuense tiene 23 años, estudia Enfermería y está a punto de recibirse. “Sólo me faltan dos materias, pero ya estoy trabajando como auxiliar en un domicilio particular, con una paciente que tuvo un accidente”, contó a Ahora ElDía.
Con recaudos y reticencias producto de que prefiere no contar demasiado hasta que el trasplante sea exitoso, Florencia reveló que “decidí donar en 2019, y me llevó a hacerlo una charla que hubo de la ONG Donar en Vida, cuando estaba cursando la carrera en el Hospital Centenario”.
“Ellos ese día me sacaron turno para donar sangre un lunes, cuando todavía estaba el Banco de Sangre allá en Luis N. Palma, y me preguntaron si quería ser donante de médula ósea y así fue, y así quedé registrada como donante voluntaria”, relató la joven.
Acerca de cómo se prepara para el trasplante, comentó que tuvo una charla en el ONG donde le explicaron los dos procesos posibles, y que ella tiene que optar por uno de ellos.
“Hay dos tipos de procesos. Puede ser por punción, que te pinchan, ya es quirúrgico, porque va con anestesia general. Te punzan y te pinchan, te extraen directamente la médula. Y si no por vía periférica, que es aféresis. Te conectan a una máquina y esa máquina te extrae las células madre y que requiere el paciente para que le vas a donar. Si tiene ninguna secuela física, no, no tiene ninguna secuela física, porque a vos, para poder extraerte te dan cinco inyecciones, que eso hace que vos generes más y eso es lo que vos le donarías al paciente que lo requiera”, resumió Florencia.
Sobre estos procesos, la Técnica en Hemoterapia Rosana Galindo confirmó que “existen dos métodos de extracción de la médula ósea, y el procedimiento se hace en Buenos Aires, luego es el Incucai quien se encarga del traslado de las células. Esto quiere decir que Florencia no va a tener que volar a Estados Unidos para que se concrete la donación. La entidad se hace cargo de todos los costos que suponga el operativo”.
De la punción, puntualizó que “la persona que dona recibe anestesia general y se extraen las CPH mediante punciones en las crestas ilíacas, que son los huesos grandes de la cadera. En este caso, la persona pasa una noche de observación en el hospital con analgésicos para prevenir cualquier tipo de dolor y luego puede retomar su vida”.
Y de la técnica de donación por aféresis, o sangre periférica, detalló que “se aplican inyecciones durante 5 días para estimular la salida de las células de la médula ósea al torrente sanguíneo. El día de la donación la persona donante se conecta a una máquina que permite separar los componentes de la sangre y extraer sólo las células necesarias para el trasplante. El procedimiento es sencillo y ese mismo día la persona que dona puede volver a su casa y retomar sus actividades habituales”.
1 en 40 millones: Qué es ser un donante emparentado
Mariana Ramírez, encargada de comunicación del Cucaier, explicó a Ahora ElDía cómo funciona el sistema de trasplantes de médula ósea, y porqué la gualeguaychuense le puede salvar la vida a un estadounidense.
“Para órganos y tejidos las listas de espera son nacionales, y se maneja todo dentro de un marco nacional, pero en el caso de la médula ósea es distinto, porque cuando alguien necesita un trasplante de médula, que es una persona que tiene una enfermedad en la sangre, una leucemia, una anemia severa… lo primero que se hace es buscar a lo que se llama el donante emparentado”, comenzó explicando.
Y precisó: “Los donantes emparentados pueden ser los hermanos de la misma mamá y el mismo papá porque son los únicos que pueden tener nuestra carga genética compatible al 100%, y cada hermano solamente tiene un 25% de posibilidades de ser compatible, osea que una persona que necesita un trasplante de médula de otra persona lo primero que se hace es estudiar a los hermanos, y en el caso de que la persona no tenga hermanos o tenga hermanos y ninguno sea compatible es ahí cuando se hace lo que se llama la búsqueda internacional”.
“¿A qué se refiere esta búsqueda internacional? Hay un registro al cual el Incucai se une, hay más de 30 países adheridos porque justamente es tan difícil encontrar donantes de médula compatible que se crea este registro internacional de posibles donantes de médula ósea. Lo que uno hace para ingresar a este registro, siempre y cuando tengas entre 18 y 40 años, es cuando vas a donar una unidad de sangre en un centro captador habilitado (como el Banco de Sangre del Hospital Centenario) y te inscribís en el centro captador: se llena una planilla, un consentimiento y de esa unidad de sangre se toma una muestra que va a la Incucai y es analizada, y así queda uno inscripto en este registro de posibles donantes de médula ósea”, detalló Mariana.
Y contó que “hoy por hoy, en este registro de donantes a nivel mundial, hay más de 40 millones de donantes. Entonces, cuando alguien tiene indicación de trasplante y no tiene al donante emparentado, se recurre a este registro mundial de posibles donantes y se busca al más compatible entre estos 40 millones de posibles donantes. Por supuesto que cuando se encuentra, como pasó el caso de Gualeguaychú, se le pregunta a la persona si está en condiciones de salud, si desea hacerlo, porque el acto es libre, se le explica cómo se dona la médula ósea que también es un acto muy sencillo y es ahí cuando se procede a la donación, a la extracción de las CPH que son las células progenitoras hematopoyéticas que sirven para el trasplante de médula ósea”.
Finalmente, consultada acerca de la cantidad de trasplantes de médula ósea que se han dado en la ciudad y en la provincia, Mariana explicó que “en realidad, no tenemos un número de Gualeguaychú y de Entre Ríos, porque esto se maneja a nivel nacional y la gente del registro es muy celosa de las identidades y de los números de la cantidad de trasplantes, pero sí obviamente son muchísimas las personas en Entre Ríos con indicación de trasplante y que se han trasplantado, ya sea en un trasplante autólogo, en un trasplante con donante emparentado o en un trasplante buscando en el registro internacional”.
“Ha habido muchos entrerrianos que se han trasplantado gracias a donantes de otros países, gracias a donantes en este registro y al revés, ha habido muchos entrerrianos, no tantísimos casos porque imagínate que son 40 millones de voluntarios en el mundo, así que ser un donante real de órganos como va a suceder con esta chica de Gualeguaychú ahora es una posibilidad en 40 millones, literal”, concluyó.