Cómo leer los votos en blanco

Técnicamente votar en blanco significa introducir en la urna el sobre vacío o con un papel en blanco. En Entre Ríos, en las últimas Primarias (PASO), muchos votantes hicieron esta elección emparentada con el "antisistema".Es importante destacar que el "blanco" es un voto válido, en contraposición al nulo, recurrido o impugnado. Un sobre vacío o con un papel en blanco, expresa la voluntad política de un elector.En este sentido, tiene el mismo estatus que un voto afirmativo. Aunque en este último caso la voluntad va dirigida a favor de uno o más candidatos, mediante una boleta oficializada.Quien vota en blanco, por el contrario, se abstiene de elegir entre diversas propuestas formuladas en el sistema legal de sufragio, pero eso no significa que no haya hecho un pronunciamiento político.Al contrario, la lectura convencional del voto en blanco, es que es una herramienta con la que cuentan los electores para manifestar disconformidad con todos los candidatos y con las propuestas formuladas por los partidos.Pese a esta "positividad", el sistema electoral argentino (después de la reforma constitucional del '94) no computa los votos en blanco para determinar los porcentaje de cada candidato (colocándolos así al mismo nivel que los nulos e impugnados).Para algunos observadores no computar el voto en blanco es una trampa urdida por las oligarquías políticas con el propósito de minimizar las exigencias cuantitativas para alcanzar los porcentajes necesarios.Hay que pensar que en Argentina, en el caso del presidente, se ganan las elecciones y se evita el balotaje obteniendo el 45% de los votos afirmativos. Si hay muchos votos en blanco, el candidato alcanza ese porcentaje con menos cantidad de votos.Ejemplo: si hay 10 votos en total y de ellos 5 son de la fuerza A, 3 le corresponden a la fuerza B y 2 pertenecen a la fuerza C, los porcentajes son: A 50%, B 30% y C 20%. Pero si 5 son de la fuerza A, 3 pertenecen a la fuerza B, y los 2 votos restantes son en blanco, los porcentajes son: A 62,5% y B 37,5%.Cabe consignar que en las PASO de este año, para la categoría Presidente hubo aproximadamente 990.000 votos en blanco, sobre un total de 23.200.000 sufragios emitidos. Es decir, un 4,27%, lo que equivale a la cuarta fuerza política más votada (detrás de FpV, Cambiemos y UNA).Pero en Entre Ríos, el voto en blanco tuvo un protagonismo relevante. Según el escrutinio definitivo, representó la tercera fuerza política para la categoría Gobernador. En el global sumó 174.225 sufragios, es decir un 20,83% de los votos emitidos (afirmativos, blancos, nulos).Respecto al ítem Presidente, el blanco cosechó 12,34%, con 103.196 votos. De esta manera, en este rubro se constituyó en cuarta fuerza política en la provincia.En la ciudad de Gualeguaychú, tanto para Intendente como para Gobernador, fue cuarta fuerza política, con 12,65% y 14,12% respectivamente.En cuanto al Departamento, en la categoría Gobernador, el voto en blanco fue tercera fuerza: sumó el 13,77% (12.671 sufragios).¿A qué atribuir este protagonismo del voto en blanco? Las explicaciones van desde las benignas, que postulan por ejemplo que hubo un alto desconocimiento de los candidatos, hasta las más sombrías sobre el sistema político entrerriano, relativas a una profunda insatisfacción y desencanto hacia candidatos y partidos.¿Resabios del "que se vayan todos" de 2001?, se preguntan algunos sugiriendo que el voto en blanco equivale a una suerte de "cacerolismo" electoral.