Detrás de una linda cola puede haber un problema

Tener un cuerpo llamativo parece una exigencia inevitable para la mujer de hoy, pero si para ello se debe cargar con una alteración del raquis, algo se está haciendo mal. La hiperlordosis lumbar levanta la cola, pero daña la columna. Por Dres. Norberto Furman y Abel LemiñaJefe y Sub-Jefe Equipo de QuiropraxiaInstituto Furman de Bs. As. El pensamiento actual tiene como signo idiosincrático el ideal estético, la búsqueda de la perfección corporal, al que se debe llegar a cualquier costo, gimnasios, spa, cirugías, inyecciones con toxinas, colágeno y otras yerbas, no importa si hay que sacar un crédito para lograr el objetivo.Uno de los items de ese esteticismo vigentes es la cola, tanto que una mujer que tiene flojos los glúteos o sea la “cola caída”, siente que está fuera de competencia. Algo injusto, producto de un materialismo exagerado, expresado en lo que es el paradigma actual de belleza, pero lamentablemente hoy se vive así. Llamativa pero patológicaResulta que algunas de las colas más pronunciadas, llamativas y famosas suelen ser el resultado de una patología de la columna vertebral, la hiperlordosis lumbar, que es el incremento de la curva natural que hay en esa zona del raquis.En otros casos, no es una afección real, sino una actitud o postura forzada, conciente, que busca hacer sobresalir la cola, estando ante una hiperlordosis gestada para llamar la atención. Muy común en las vedettes que viven exponiendo sus cuerpos, además de bailar y otras cualidades artísticas. Lo normal y su buen ritmoVamos un poco a lo que es normal para entender mejor lo que no lo es, aunque quede lindo visto desde afuera. La columna vertebral tiene curvas fisiológicas, normales, que le dan estática y funcionalidad. De ellas, dos son lordosis, la cervical y la lumbar, ambas tiene una concavidad posterior.La que nos interesa hoy es la lumbar, que no actúa sola, sino que tiene una relación biomecánica directa con la pelvis, a la cual se articula mediante las partes laterales del sacro, cuya coordinación ideal se denomina “ritmo lumbopélvico”, en el que por tantos grados de flexión de la cadera, la pelvis rota y la columna lumbar excursiona en forma equivalente disminuyendo la lordosis, acompañando como lo dice el nombre rítmicamente el movimiento.Esa suave curva lordótica, en sus grados normales, orienta perfectamente la posición de los discos intervertebrales y las carillas articulares de la parte posterior de las vértebras, que son las que dan dirección al movimiento. Diseño anatómico perfecto, en estática y en dinámica, pero en realidad, no siempre las formas, las curvas y la función son tan ideales como deberían ser. Tal el caso de las hiperlodosis, que detrás de una cola llamativa pueden acarrear importantes problemas lumbares. Curva riesgosaEn algunos casos congénita, otros por desbalances musculares, por ejemplo el tan común acortamiento de isquiotibiales, secuelas de traumatismos, o actitudes posturales a repetición como mencionamos antes, la hiperlordosis es una alteración aunque a veces no provoque síntomas severos.Si en estado normal hablamos de “ritmo lumbopélvico”, la hiperlordosis desentonará y se saldrá de ritmo, siendo para la columna lo que es para el oído un cantante cuando desafina.Los músculos estarán contracturados, las carillas articulares tendrán una hiperpresión que las desgastarán induciendo a una futura artrosis y los discos quedarán orientados de una manera que facilitan el desgarro del anillo fibroso siendo un factor de riesgo para las hernias discales. Sana, llamativa y rítmicaToda hiperlordosis debe ser tratada, lo que no va en contra de la estética, por el contrario, un cuerpo que tiene su ritmo lumbopélvico coordinado luce mejor que una cola levantada con una cara arrugada por el dolor que genera tarde o temprano. Con elongaciones musculares, ejercicios programados, fisioterapia y corrigiendo la función y fuerzas internas, con manipulaciones quiroprácticas, podemos hacer recuperar ese ritmo perdido y sin desentonar, hacer lucir su cuerpo, porque la mejor belleza siempre se nota en un cuerpo sano que no sufre y entonces, se le indicarán ejercicios para tonificar los músculos que quiera pero respetando la fisiología por encima de las modas.