El lado oscuro de la economía china
Se habla con admiración del milagro económico chino, asentado en una industrialización acelerada, pero se suele pasar por alto el elevado costo ambiental del proceso. El país asiático ha devenido en las últimas décadas en una gran factoría mundial, por la radicación de firmas multinacionales, convirtiéndose así en la nueva estrella del sistema capitalista.El experimento arroja resultados económicos sorprendentes, propios de la industrialización: expansión de la producción, auge de la urbanización, nueva clase media, aparición de una casta de millonarios, y un país que se ha convertido en acreedor global.Pero el modelo tiene un doloroso costo: crecen año a año las muertes por contaminación, a causa del desenfrenado crecimiento económico de las últimas tres décadas.La contaminación del aire, recurrente en las grandes urbes chinas, provoca anualmente la muerte prematura de entre 350 y 500 mil personas, según el ex ministro de Sanidad de China, Chen Zhu.Este dato (uno de los pocos que emerge de un alto oficial) es más conservador que otros realizados por diversos especialistas, que aseguran que en 2010 hubo 1,2 millón de muertos vinculados a los efectos nocivos de la contaminación.En la Megápolis/megalópolis y extensas áreas geográficas hay gente que nace y muere aquejada por extraños tumores. Según el Banco Mundial (BM), 16 de las 20 ciudades más contaminadas del mundo son chinas. La lluvia ácida riega un tercio del país y 300 millones de habitantes carecen de agua potable.La aparición de numerosos casos de cáncer es un tema tabú y prohibido para el gobierno comunista, que pretende mantenerlo a espaldas de la comunidad internacional.La población infantil es la más vulnerable y la que más sufre las consecuencias de la contaminación ambiental. Muchos chicos nacen con graves malformaciones o enferman a los pocos meses, algo que las familias no se atreven a denunciar.Por otro lado, un estudio publicado a mediados de 2013 por la Academia Nacional de Ciencias de China aseguró que la población residente en el norte del país vive una media de cinco años y medio menos que la del sur a causa de la contaminación que provoca la combustión de carbón.Los científicos aseguran que los 500 millones de residente en la zona norte de China viven menos que en el sur, como consecuencia de la contaminación provocada por la combustión del carbón que exige el sistema de calefacción.El aire contaminado es un problema mayúsculo. Estos días el gobierno se vio obligado a extender la zona de peligro por smog a un área donde habitan 400 millones de ciudadanos.El nivel de contaminación superó en muchos lugares los 400 microgramos por metro cúbico, lo que multiplica por 16 el límite recomendado por la Organización Mundial de la Salud (OMS). En Pekín, la capital del país, se decretó horas atrás el alerta naranja, porque el aire está lleno de humo y la visibilidad es de apenas unos cientos de metros, circunstancia que ahuyenta el turismo.Las autoridades sanitarias recomendaron que los mayores y los chicos no salgan de sus casas y que los 20 millones de habitantes de la ciudad se protejan con barbijos si tienen que salir a la calle.Cabe consignar que China es la mayor consumidora del mundo de energía, dos terceras partes de las cuales proceden del carbón, cuya combustión es altamente contaminante.Frente a esta realidad, hay expertos que no tienen dudas en afirmar que el milagro económico chino se está convirtiendo en una mega catástrofe ecológica.
ESTE CONTENIDO COMPLETO ES SOLO PARA SUSCRIPTORES
ACCEDÉ A ÉSTE Y A TODOS LOS CONTENIDOS EXCLUSIVOSSuscribite y empezá a disfrutar de todos los beneficios
Este contenido no está abierto a comentarios