El Papa argentino: ¿por qué Francisco I?
Mientras el mundo, y sobre todo el país, aún no salen de su asombro -lógicamente impactados por la noticia- que el Papa argentino, recientemente elegido, contestara "vocabor Franciscus" (me llamaré Francisco) ante la pregunta de cómo quería ser llamado, es todo un signo.La explicación del cambio de nombre, según los teólogos, es que en la Biblia Dios siempre llamaba de otro modo a aquellas personas a quienes encomendaba una misión determinada (a Simón lo llamó Pedro).Por esta razón el sumo pontífice modifica su nombre una vez que asume la misión de convertirse en la cabeza visible de la Iglesia. Esa elección, así, puede tener una intención que va más allá de una preferencia personal.No es aventurado especular, en este sentido, que el nombre adoptado por Jorge Bergoglio, hasta ayer arzobispo de Buenos Aires, refleja el estilo con el que querrá marcar a su pontificado. Al respecto, todo apunta a que se trata de un homenaje a Francisco de Asís.El retorno a la simplicidad primitiva, frente a los oropeles del poder instalado en la jerarquía eclesiástica, generó siempre crisis dentro de la Iglesia Católica. Hubo movimientos, como el de los cátaros (puros), que amenazaron su unidad, allá por la Edad Media.San Francisco, en cambio, abrazó la pobreza pero sin romper con Roma. No acusó a aquellos cuyos vicios deploraba. De ser hijo de un rico comerciante en su juventud, se desprendió de todos los bienes, y vivió una vida austera y simple, bajo la observancia de los Evangelios.Que el heredero del trono de Pedro haya adoptado el nombre de Francisco, inaugurando una nueva tradición dentro de la Iglesia, ¿supone acaso que su pontificado estará caracterizado por la austeridad?Quienes han tratado al cardenal Bergoglio aseguran que quedó marcado por la vida del santo de Asís. Además él como persona tiene fama de llevar una existencia sobria y frugal, y de ser poco amante de los lujos.Las crónicas resaltan, por ejemplo, que solía utilizar el colectivo o el subte para movilizarse en Buenos Aires, y destacan que renunció al coche oficial para acudir al cónclave.Otro rasgo del prelado argentino -que vive en un continente caracterizado por el contraste entre ricos y pobres- es una aguda percepción de los problemas sociales y económicos.Todas estas cualidades hacen pensar a mucha gente que el nombre de Francisco I nunca ha sido más pertinente que en el caso de Bergoglio, dando a entender que el santo de Asís inspirará su pontificado.Sin embargo el argentino es jesuita y también podría haberse inspirado en un santo de esa orden, Francisco Javier, quien fue un relevante misionero de la Compañía de Jesús.El llamado Apóstol de las Indias se destacó por su evangelización en el oriente asiático y en el Japón. Murió en la isla de San Xon, en China, consumido por la enfermedad y los trabajos, en 1522.Los analistas coinciden en señalar que la Iglesia Católica debe recuperar el terreno perdido. En muchos países de Occidente, de tradición cristiana, ha perdido gravitación, y no logra conectar con una sociedad que vive de espaldas a sus enseñanzas.Entonces, ¿será el gran reto del Papa argentino Francisco I imitar el espíritu de ese jesuita que se lanzó a tierras desconocidas, para llevar allí el mensaje de Cristo, dentro de una política de evangelización católica?También es probable que Francisco I haya decidido adoptar los carismas de los santos en cuestión, austeridad y vocación misionera, haciéndolos ejes de su pontificado.
ESTE CONTENIDO COMPLETO ES SOLO PARA SUSCRIPTORES
ACCEDÉ A ÉSTE Y A TODOS LOS CONTENIDOS EXCLUSIVOSSuscribite y empezá a disfrutar de todos los beneficios
Este contenido no está abierto a comentarios