El “plus” médico, un problema de vieja data
El cobro de un adicional por consultas y prácticas médicas a pacientes con obra social es una práctica que, aunque ilegal, se extiende cuando los profesionales de la salud perciben una merma en sus honorarios.Los médicos que apelan a esta metodología alegan que se ven forzados a hacerlo para defender el valor de su trabajo. Y esto porque las obras sociales no les pagan o les pagan poco.La realidad actual es que las obras sociales atraviesan serias dificultades económicas y esto crea las condiciones para que el mentado "plus" médico melle el bolsillo de los afiliados.Estos últimos pasan a convertirse así en la variable de ajuste de las diferencias entre los prestadores del servicio de salud y las obras sociales. ¿Denuncian este cobro indebido los afiliados?Más bien lo que existe son quejas informales. Es difícil que los pacientes obligados a pagar este sobre-costo puedan y quieran accionar individualmente contra esta práctica.Acaso algunos de ellos tengan temor a cualquier forma de represalia. Malquistarse con el médico que a uno lo va a curar, por lo demás, no resulta aconsejable. Por otro parte, se percibe que una denuncia individual de poco serviría para revertir la situación general.El tema del plus médico tiene varias aristas. Se trata en principio de un cobro ilegal y por tanto cuestionable. Al mismo tiempo, visto desde otro ángulo, es reflejo también del desfinanciamiento de las obras sociales, un tópico arduo y polémico.¿Por qué se desfinancian las obras sociales? Los representantes de estas organizaciones se quejan de las deudas que tienen con ellas sus aportantes, primero los gobierno y Estados y luego las empresas privadas. Lo cual en sí mismo es algo muy grave.Pero además cabría preguntarse: ¿el gerenciamiento de las obras sociales en Argentina es eficiente y cristalino? ¿Cuál es el control que tienen estas entidades? ¿Y cuál es el papel que tienen los afiliados en la vigilancia de su obra social?El cobro del plus médico, como se sabe, es un problema de vieja data en Argentina. También se sabe que los acuerdos firmados entre las agrupaciones médicas y varias obras sociales han estado siempre envueltos por un clima de tensión.¿Está bien que haya médicos que recurran a asegurar su honorario cobrando al paciente un coseguro extra? ¿Es legítimo, desde el punto de vista ético, que aquel quiera preservar el valor de su trabajo, aunque apelando a una vía ilegal?Alguno de ellos podrá alegar que es la misma situación embarazosa en que se halla aquel empresario que se ver forzado a eludir impuestos porque la presión fiscal es de tal magnitud que si no hace eso tiene que cerrar su negocio.No pagar impuestos es ilegal. Pero lo gravoso del sistema impositivo en muchos casos lleva al contribuyente a un callejón sin salida, haciendo que deba optar entre la informalidad o fundirse.¿Es posible, por tanto, que el atraso en los pagos o la desactualización de los valores en que incurren las obras sociales fuercen a los médicos también al cobro de "plus" como un modo de salvarse?A este razonamiento podrían hacerse, sin embargo, algunas objeciones. El médico está obligado a plegarse a los términos del acuerdo que la entidad que lo representa firmó con alguna obra social, aunque individualmente se muestre disconforme.Parece claro que desde el momento que acepta la orden de consulta de un paciente de la obra social que sea, está aceptando también los términos de ese acuerdo contractual. En cuyo caso el cobro del plus es, cuando menos, una contravención o un quiebre en las reglas de juego.
ESTE CONTENIDO COMPLETO ES SOLO PARA SUSCRIPTORES
ACCEDÉ A ÉSTE Y A TODOS LOS CONTENIDOS EXCLUSIVOSSuscribite y empezá a disfrutar de todos los beneficios
Este contenido no está abierto a comentarios