El poder de la agresión
El maltrato físico, psíquico o social a los adultos mayores es una triste realidad que la mayoría de las veces pasa desapercibida. Por Elsi Rodrí[email protected] Vejez, tercera edad, adultos mayores, diversas expresiones que en definitiva encierran simplemente una nueva etapa en la vida del ser humano. Momento en el cual muchas veces se está inserto en una familia donde los hijos y los nietos tienen un protagonismo activo y decisivo en el hogar y esa persona tiene un rol mucho más pasivo. Así es como entonces, en la vorágine laboral y social en la que se vive en la actualidad el anciano termina siendo un estorbo en la familia y ese es el punto de inflexión donde a menudo comienzan los malos tratos."Envejecer de alguna manera implica cierto grado de dependencia. Entonces si en una familia con múltiples ocupaciones, hay un integrante anciano y a esto se le suman otras condiciones, como por ejemplo alguna enfermedad crónica, la realidad se complica y es allí donde se pueden desencadenar situaciones de maltrato", comenzó diciendo en la entrevista Cielo Gelós, Trabajadora Social". De acuerdo a algunas estadísticas los principales victimarios de los adultos mayores lo representan en primer término los propios hijos y el segundo lugar lo ocupan los cónyuges.¿Cuál es su opinión al respecto?La violencia es ejercida de diversas formas y es muy invisibilizada, pero es una cruda realidad. Habitualmente para hablar de este tema debemos situarnos en las personas más cercanas, es decir el entorno familiar. Es de allí de donde provienen las primeras respuestas violentas, descuidadas. Esto por supuesto, no podemos circunscribirlo exclusivamente a ese ámbito, pues también se extiende el maltrato en lo social, cuando el adulto mayor es relegado y olvidado por las políticas de estado que no contemplan esta etapa de la vida como eje de mayor atención.¿Cómo se da el proceso por el que se llega?Se ejerce también violencia a partir de los cambios en la seguridad social relacionados con el campo del bienestar social, refiriéndome a la protección o la cobertura de las necesidades socialmente reconocidas, como la salud, la jubilación, las discapacidades, la cobertura médica y otras. Esa ausencia en la protección que la sociedad debe proporcionarle a sus miembros, mediante una serie de medidas públicas, contra las privaciones económicas y sociales también en una forma de maltrato encubierta. Familia y sociedad son pilares en la vida de las personas en cualquier etapa de la vida y el abandono social y familiar es la primer forma de ejercer la violencia en la senectud.¿Qué pasa en el interior de ese abuelo?Al ejercer la violencia emocional es posible ubicar al anciano en un lugar de improductividad, no permitiéndole un espacio para su desenvolvimiento y para su realización personal.El aislamiento, la indiferencia, el invalidar la palabra, la anulación de la opinión son todas conductas y actitudes que desmerecen la calidad de persona y terminan anulando al ser humano. Trompadas, puntapiés y bofetadas son sin lugar a dudas las agresiones más evidentes y de las más frecuentes. Lo habitual al hablar de violencia es llevar el pensamiento hacia el maltrato físico; sin embargo, ese maltrato psicológico es el más ejercido por los familiares en la vida cotidiana y tiene un poder altamente destructor.¿De qué manera se socava en la psiquis del anciano?La no-participación en la toma de decisiones, incluso hasta de su propia vida. El tener que depender de algún familiar para poder ir al médico, para recibir la comida o para ser higienizado, todo conforma una realidad que si no es atendida con ética, atenta contra la integridad de la persona. Incluso yendo a lo económico, cuando se usufructúa del dinero del anciano sin que él tenga acceso y libertad a lo que es su dinero, eso también es maltrato. La cultura del endiosamiento de la eterna juventud que existe hoy en día atenta contra la dignidad de la persona que transita su tercera edad; tal vez no directamente, pero de modo colateral repercute y deja marcas.¿Esto también no es atentar de modo invisible?Tal vez, no lo puedo asegurar, pero yo creo que sería bueno que cada uno piense en su propia vejez, que elabore ese tránsito para llegar entero y con proyectos; y que no lo vea como una etapa tan alejada de la vida. Pienso que justamente el querer negar esa etapa es lo que hace querer vivir eternamente joven y despreciar todo lo que signifique ancianidad.Para cada etapa hay que ir preparándose; esto permitiría que cada uno pueda ir respetando, aceptando y valorando la siguiente. Debemos tener en claro que la ancianidad será un reflejo de cómo hemos vivido. APUNTES Llegar a ViejoSi se llevasen el miedo,
y nos dejasen lo bailado
para enfrentar el presente.
Si se llegase entrenado
y con ánimo suficiente.y después de darlo todo,
en justa correspondencia,
todo estuviese pagado
y el carnet de jubilado
abriese todas las puertas.
Quizás llegar a viejo
sería más llevadero,
más confortable,
más duradero.Joan Manuel Serrat
y nos dejasen lo bailado
para enfrentar el presente.
Si se llegase entrenado
y con ánimo suficiente.y después de darlo todo,
en justa correspondencia,
todo estuviese pagado
y el carnet de jubilado
abriese todas las puertas.
Quizás llegar a viejo
sería más llevadero,
más confortable,
más duradero.Joan Manuel Serrat
ESTE CONTENIDO COMPLETO ES SOLO PARA SUSCRIPTORES
ACCEDÉ A ÉSTE Y A TODOS LOS CONTENIDOS EXCLUSIVOSSuscribite y empezá a disfrutar de todos los beneficios
Este contenido no está abierto a comentarios