nexplicablemente el silencio generalizado está jugando a favor del SIDA, es hora de hablar más que nunca. Por Dr. Abel Lemiñ
[email protected] La oposición critica al oficialismo, el gobierno le pega a los medios, el agua tapa medio país y la sequía devasta a la otra mitad, los clubes grandes no figuran en los primeros puestos del campeonato de fútbol, el campo sigue su reclamo, accidentes en las rutas, siguen dando vueltas las cifras del INDEC, pero ni la radio, el diario ni la tele mencionan algo acerca del VIH, ni noticias, ni campañas, ni solicitadas, ni manifestaciones, ni piquetes protestando por el SIDA.Misteriosamente o absurdamente, Barack Obama fue distinguido con el premio Nobel de la Paz y para demostrar el acierto del jurado a los pocos días envía treinta mil soldados a Afganistán, Berlusconi sigue haciéndose el héroe sexual, le siguen apareciendo hijos a Lugo, continúa
Ahmadinejad desafiando a occidente, occidente sigue desafiando a Irán y a todo lo que no se alinea con él, Colombia y Venezuela se miran de reojo, todas noticias, pero del VIH-SIDA ni mu, nadie habla, nadie escribe, nadie dice.¿Será que el virus decidió pasar a retiro, que se dió por vencido y le ganamos la batalla? Pero de ser así, yo que estoy en salud me hubiese enterado, aunque sea un mísero mail me hubiese dado la nueva, pero claro tal vez el antivirus de la computadora le ganó también al VIH.Con tanto silencio seguro lo derrotamos, con la inacción absoluta, sin campaña, sin mensajes, sin nombrarlo por fin le ganamos con la vieja táctica de la indiferencia. ¡Qué suerte!, porque la verdad que nos tenía a mal traer, eso de infectar para siempre, eso de mutar para que no podamos encontrar una vacuna, eso de que cada 16 segundos en el mundo alguien se infectaba con el VIH, la verdad que es un alivio que no haya más SIDA; que se haya esfumado el virus de inmunodeficiencia humana. ¡Qué bueno! El secreto estaba en no nombrarlo, en no hablar del tema, en no decirle a la gente que se cuidara del SIDA, que tratara de tener una pareja estable, que use preservativo ante relaciones sexuales ocasionales, que cuidado con la jeringa si son adictos a las drogas, que no compartieran la aguja y así, yo perdiendo el tiempo seguía informando para hacer prevención del SIDA.Qué tonto me siento, informando a la población sobre un virus que infectó a cuarenta millones de personas, una pandemia increíble, y resulta que la fórmula era ignorarlo, no tenerlo en cuenta, que el silencio era el arma ideal.Qué equivocado viví todos estos años, creyendo que una sociedad informada podía prevenirse de la infección, y al fin, luego de buscar en los últimos tiempos noticias o notas sobre aquel virus maldito que mató y enfermó a tantos millones, y ver total ausencia de palabras, por deducción comprendí que aquella frase de la dictadura era real: "El silencio es salud" por lo tanto, si no lo menciono no está, ergo, no hay más VIH.Parece que hay agua en la Luna, estamos salvados, con agua acá nomás en la Luna y sin VIH en la Tierra, estamos ¡espectacular!.Pero lamento comunicarles que la táctica mediática falló, que el Estado y las otras instituciones que entraron en misterioso silencio no tienen razón. Les doy la verdadera y última noticia, tan veraz que no acepta discusión ni censura alguna, lamentablemente el VIH sigue infectando a los humanos, sigue castigándonos y para peor, el silencio lo potenció, porque el silencio es cómplice del virus.Banfield puede salir campeón por primera vez, Macri mandó a espiar o no, Antonini WIlson y la valija siguen dando que hablar... pero en la primera plana de todos los diarios, en radios y en la televisión debe publicarse la noticia: "El virus de inmunodeficiencia humana vive, aún no hay vacuna y debemos seguir cuidándonos".