La capacidad de daño del crimen organizado
"¿Qué son los reinos sin justicia, sino vastos latrocinios?" Esta severa pregunta formulada por San Agustín, a comienzos del siglo V en su célebre 'Ciudad de Dios', resuena hoy con inquietante actualidad.Si se remueve la justicia, los gobiernos o los Estados no son más que "bandas de criminales", postuló uno de los máximos pensadores del cristianismo, quien presenció la caída del Imperio Romano, fenómeno que atribuyó a una crisis moral interna.San Agustín es bastante elocuente contra los regímenes políticos que han dejado de regularse por la justicia. Esto escribe: "Por ello, inteligente y veraz fue la respuesta dada a Alejandro Magno por un pirata que había caído en su poder, pues habiéndole preguntado el rey por qué infestaba el mar, con audaz libertad el pirata respondió: por el mismo motivo por el que tú infestas la tierra; pero ya que yo lo hago con un pequeño bajel me llaman ladrón, y a ti porque lo haces con formidables ejércitos, te llaman emperador".El mal de la injustica asecha a las sociedades en las cuales reina la impunidad y quedan a merced del llamado "crimen organizado" cuyo accionar, en tiempos de globalización, trascienden las fronteras de los países.Este tipo de asociaciones son definidas por Interpol en estos términos: "Cualquier grupo que tiene una estructura corporativa cuyo objetivo primario es obtener dinero a través de las actividades ilegales, y sobrevive a menudo en el miedo y la corrupción".Ahora mismo en Argentina, tras un cambio de ciclo político, los jueces han empezado a investigar el "delito de lavado de dinero", una de las principales conductas que desarrollan los grupos delictivos organizados.El lavado es la operación en virtud de la cual el dinero o los bienes de origen ilícito se integran al sistema económico-financiero legal. De esta manera, obtienen una apariencia de haber sido obtenidos en forma lícita.Por este mecanismo el dinero "sucio", que proviene de prácticas non sanctas, logra "blanquearse", es decir aparece como el fruto de actividades legítimas, ocultándose así el llamado "delito precedente".La mayoría de los delitos de gran envergadura tienen un carácter trasnacional, es decir que el esquema de la criminalidad que lo hace posible opera a escala global o tiene conexiones internacionales.Esto se echa de ver en el tráfico de drogas, otro de los negocios ilícitos de los que viven los grupos criminales, los cuales tienen una gran capacidad para colonizar las estructuras estatales y dominar los territorios.Pero el contrabando de drogas va en paralelo con otro gran delito, el tráfico de armas. En efecto, en aquellos lugares donde se pelea contra el crimen organizado se verifica la confluencia del negocio clandestino del narcotráfico con el tráfico de armas, como si fuesen dos caras de una misma moneda.Los expertos que siguen de cerca a los grupos criminales de fuste, señalan que éstos controlan también otros negocios como el tráfico de personas. Unicef sostiene que más de un millón de mujeres y niños son vendidos anualmente en el todo el mundo. Y se sabe que Argentina es un país que "exporta" niños y mujeres para explotación y turismo sexual.¿Cómo se combate el crimen organizado? ¿Cómo se evita que los reinos, al decir de San Agustín, se conviertan en vastos latrocinios?Están quienes creen que cuando un Estado está bien organizado y sus funcionarios son transparentes y honestos, hay chances de derrotar a las bandas criminales.
ESTE CONTENIDO COMPLETO ES SOLO PARA SUSCRIPTORES
ACCEDÉ A ÉSTE Y A TODOS LOS CONTENIDOS EXCLUSIVOSSuscribite y empezá a disfrutar de todos los beneficios
Este contenido no está abierto a comentarios