La terapia online es la nueva tendencia
Acudir al psicólogo hace tiempo dejó de estar asociado a trastornos mentales graves. Los desajustes emocionales de las personas han popularizado la consulta profesional. La última tendencia es la ciberterapia. La consulta a un profesional de la salud mental estuvo asociado popularmente, en el pasado, a la locura, entendida como "pérdida de la razón". Ahora gente de todos los sectores sociales y culturales va al psicólogo para tratar un problema de pareja o con sus padres, o alguna dificultad emocional, y de esta manera mejorar su calidad de vida. Por cierto que existen las enfermedades mentales severas, con base orgánica, que requieren del concurso de la medicina a través de la figura del psiquiatra, quien puede medicar. Pero hay todo un campo vinculado a los conflictos anímicos que son abordados por los psicólogos clínicos, a través de la "psicoterapia". La novedad es que este último tratamiento se está expandiendo en su modalidad virtual. La "terapia online", así se llama, suma adeptos en todo el mundo y sobre todo en Argentina, considerada uno de los países con más psicólogos por habitante en el mundo. Cada vez son más, en suma, los que se psicoanalizan por Internet, una moda que se impone con el auge de las nuevas tecnologías. Depresión, ansiedad, ataques de pánico, insatisfacción sexual, adicciones, problemas de pareja, y todos los desarreglos emocionales y conductuales imaginables, pueden tener un abordaje online. Es lo mismo que ir al consultorio, pero con la ventaja de no tener que trasladarse. Las consultas pueden hacerse vía chat privado, videoconferencia por Skype o Messenger, mail y teléfono. La popularidad del método obedece, entre otras razones, al hecho de que como los horarios laborales de mucha gente no son compatibles con los turnos en los consultorios, es factible consultar al psicólogo en horas del almuerzo, la tardecita noche, e incluso los fines de semana. El universo virtual, por otro lado, alienta la desinhibición. "En el chat, con los amigos, las personas se liberan, dicen un montón de cosas que quizá personalmente no se animarían, o les costaría un proceso más largo llegar a decir", comenta Cecilia Abate, psicóloga de la UBA, y mentora de Terapia Online. Marisa Masón, es una de las pioneras de este servicio y creadora de Psico-asistencia.com, en cuya página se dirige al público en estos términos: "El objetivo es conocerte, saber qué te pasa, que puedas contar todo acerca de tu estado para que accedas a la ayuda adecuada, de la misma manera que si estuvieras hablando cara a cara con un psicólogo". Allí se cuenta que la persona que llega a terapia, cualquiera sea la naturaleza de su sintomatología, "se encuentra en un estado de desmoralización que puede ser caracterizado por: pérdida de la autoestima, sentimientos de ineptitud, desvalimiento, desaliento. Esta sensación de incompetencia subjetiva coloca al individuo en un lugar donde es difícil hacer frente a las demandas del medio y de los otros". La sensación global de malestar psicológico, así, puede hallar una respuesta a través de un proceso psicoterapéutico online, que explota todas las modalidades que ofrecen las nuevas tecnologías digitales. El abordaje online de los conflictos psicológicos revela, por otro lado, el impacto que tiene Internet en la reformulación de las profesiones (en este caso la psicología clínica), y el uso múltiple que le dan los internautas a la red (la salud mental vía la ciberterapia). No hay esfera de la vida cotidiana, así, que no esté afectado por el entorno virtual.
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