La escuela Normal es una institución centenaria por la que ha pasado gran parte de la población de Gualeguaychú. Luego de varios años de abandono en su estructura, se desarrolla una importante obra de restauración.El ala que da a calle Perón está prácticamente terminada, mientras que los obreros continúan en el patio cubierto y nuevas aulas. Todavía falta para la reinauguración formal de la ENOVA y los vecinos ya deben lamentar las pintadas con aerosol en sus paredes recién pintadas.Es imposible contar con seguridad durante las 24 horas para las escuelas o edificios públicos; debemos entonces, apelar a la educación de la gente, al respeto por lo ajeno y por lo que es de todos, como las escuelas.Las pintadas en una pared son sólo un símbolo, una muestra de algo que es mucho más profundo. Las pintadas con aerosol son la marca emergente de la falta de respeto, de la poca importancia por el esfuerzo del otro.El mismo problema se observa en la Escuela Técnica N° 1 donde la esquina de San Martín y Maipú se observa repleta de grafittis y pintadas que muchas veces lo hacen hasta los propios alumnos.El Estado es el responsable de brindarle a los alumnos edificios dignos y en condiciones para estudiar, pero luego, somos los ciudadanos quienes tenemos la responsabilidad de cuidar lo que en definitiva, es nuestro.Atender reclamos del vecinoEn las últimas semanas se han escuchado varias voces de vecinos -de diferentes sectores de la ciudad- solicitando el paso de una máquina o el arreglo integral de una calle o de varias. Corte de arterias por parte de los habitantes de un lugar determinado, reuniones en una escuela para iniciar planteos a la municipalidad; son ejemplos de lo que se ha observado.Desde la municipalidad se ha informado el plan de arreglos de calles de tierra y ripio, aclarándose que hay que sortear el mal tiempo, la lluvia y que las mismas se sequen para poder trabajar.Lo cierto es que en muchas calles los pozos se notan y mucho, que los ciclistas, motociclistas y automovilistas deben conducir con mucho cuidado para evitar roturas o males mayores.Es imprescindible que la respuesta llegue al vecino. También, es cierto, éste debe abonar los impuestos correspondientes para que la municipalidad cuente con los fondos necesarios para desenvolverse.
