Maneras con que se niega u oculta la realidad
Nuestra comprensión de la realidad depende de la lealtad hacia ella. El principio del conocimiento necesita de los ojos abiertos. Como decía Nietzsche: el valor de un espíritu se mide por su capacidad para soportar la verdad.En el discurso de homenaje a los caídos y veteranos de Malvinas, el 2 de abril pasado, la presidenta Cristina Kirchner dijo que se había enamorado de una frase: "En la guerra, la gran derrotada es la verdad".De esta manera, daba a entender que el gobierno militar de entonces había escamoteado lo ocurrido. Y de hecho, a través de los altavoces de la propaganda bélica, había hecho creer a la sociedad argentina que la guerra se estaba ganando.A todo esto, el ex jefe de Gabinete Alberto Fernández, devenido en kirchnerista crítico, viene cuestionando la actitud de la actual administración señalando que concibe la política como una continuación de la guerra por otros medios, circunstancia en la que la verdad también sale perdiendo."El Gobierno lo que hace es plantear una lógica de la guerra, donde uno no puede darle la razón al otro porque termina siendo funcional al enemigo", dijo, explicando que así no se puede contradecir al superior ni mucho menos hablar con el enemigo.En la España de principio de siglo XX -antes de que se desencadenara la guerra civil que asoló a ese país- José Ortega y Gasset se lamentaba de la politización reinante entre los españoles, que les impedía mirar la realidad con lealtad.La vida española se había contagiado de la política partidista a un punto en que sólo importaba tener razón e imponerla a los demás, en lugar de aceptar la realidad de las cosas y sus consecuencias, cualquiera que ellas fueran."No he hallado en derredor sino políticos, gentes a quienes no interesa ver el mundo como él es, dispuestas sólo a usar de las cosas como les conviene", se lamentaba el escritor.En su versión peyorativa, la ideología designa un pensamiento desgajado de la realidad, que se desarrolla de un modo abstracto con independencia de la realidad empírica.Aquí las ideas pasan por la realidad. Es una lógica que se ha vuelto de espaldas a la verdad concreta. Es el triunfo del dogma sobre la experiencia. El filósofo francés Gustave Thibón, para hacer reflexionar sobre esto, solía contar una anécdota que vivió el, siendo pequeño, con su tío abuelo:"Un día en que paseaba con él, me preguntó: '¿Sabes aritmética?' Yo le contesté: 'Y muy bien tío'. Entonces él me dijo: 'Mira: encima de un árbol, hay diez pájaros. Pasa un cazador, dispara y mata seis pájaros. ¿Cuántos quedan posados en el árbol?'; y yo respondí: 'Cuatro'; 'No, no, tontito, porque cuando el cazador disparó, todos los otros pájaros huyeron".Thibón extrajo de la anécdota la diferencia entre la idea y los hechos: "Resulta lógico decir que son cuatro, pero en la práctica ello no ocurre porque los hechos no están siempre de conformidad con la idea".En el ámbito de la psicología, en tanto, se sabe que no siempre se quiere ver la realidad tal cual es, porque la verdad puede resultar intolerable (de ahí que Nietzsche vinculase la ceguera a la cobardía)."Negacionismo" es el término con que se describe la tendencia psicológica en virtud de la cual los humanos tenemos una habilidad probada para rechazar la información que nos resulta incómoda o amenazante.La negación puede considerarse una manera habitual de abordar problemas y conflictos. Se trata de un mecanismo de defensa mediante el cual la persona se protege de afrontar hechos dolorosos.Este bloqueo autoprotector -que puede ser inconsciente- se traduce en el rechazo a informarse activamente o a hablar sobre el tema, generando así una actitud de desinterés o indiferencia.Las expresiones "seguir la política del avestruz", "mirar para otro lado", o "no querer ver", están vinculados a este tendencia psicológica a negar la realidad.
ESTE CONTENIDO COMPLETO ES SOLO PARA SUSCRIPTORES
ACCEDÉ A ÉSTE Y A TODOS LOS CONTENIDOS EXCLUSIVOSSuscribite y empezá a disfrutar de todos los beneficios
Este contenido no está abierto a comentarios

