Más mujeres reclusas en las cárceles del país

La población femenina en el sistema penitenciario de Entre Ríos viene en aumento, según las autoridades. Se trata en realidad de un fenómeno que se verifica en el país."Algo que nos llama la atención últimamente es el incremento del número de internas alojadas en la provincia, que se ha duplicado", señaló José Luis Mondragón, director principal del Servicio Penitenciario de Entre Ríos.El funcionario explicó que el encarcelamiento de mujeres está relacionado, entre otros motivos delictivos, con el mundo de la droga. "Los delitos de orden provincial, que entienden en los tribunales ordinarios, son pasionales y contra la propiedad, y se ha observado un incremento en los que tienen relación con la infracción de la Ley 23.737 de estupefacientes", destacó.Al ser consultado si la mujer es utilizada para trasladar droga, el funcionario policial respondió: "Es una cuestión opinable, pero hay una gama bastante amplia, como la utilización de la mujer como medio de transporte y comercialización".En tanto el procurador general Jorge García también apuntó que "donde se ha percibido un cambio es en delitos que no son del fuero ordinario, como por ejemplo en los de estupefacientes". En estos casos "se ha visto mucho la utilización de mujeres como mulas, es decir aquellas que transportan estupefacientes y muchas veces lo hacen en cápsulas que se ingieren y tienen un altísimo riesgo de vida, porque si se revientan, muchas veces se mueren".Inclusive advirtió que "normalmente las mujeres son más víctimas que autoras de delitos", y en aquellos casos "son autoras de delito de transporte pero al mismo tiempo víctimas potenciales de esa conducta".Según el Once Digital, Mondragón aclaró de todos modos que la presencia femenina en las cárceles es proporcionalmente menor a la masculina. "Sobre una población que rondaría los 1.000 internos, tenemos solamente 30 personas que están detenidas en la Unidad Penal Femenina N° 6", refirió.El aumento de la población femenina en las cárceles entrerrianas coincide con una tendencia que se da en el resto del país. En efecto, un estudio realizado por la Defensoría, la Procuración Penitenciaria y el CELS en cárceles federales reveló que el encarcelamiento femenino aumentó de "manera exponencial".A la vez, el estudio reveló que siete de cada diez detenidas están procesadas o condenadas por violación a la Ley de Estupefacientes. Un amplio porcentaje está acusado de ser "mulas" y es la primera vez que está detrás de las rejas.Por otro lado, la gran mayoría son madres y tenían hijos pequeños y/o adolescentes a cargo al momento de caer en prisión, que en muchas ocasiones sufren "situaciones directas de desamparo".El encarcelamiento de mujeres en las prisiones federales aumentó 350 por ciento en menos de dos décadas, según el estudio. En 1995 había 562 mujeres detenidas, y ya en 2010, el número ascendió a 802.El informe llama la atención de la privación de la libertad en el caso de las mujeres "por las gravísimas consecuencias que provoca en sus hijos menores de edad"."Existe una gran desproporción entre el daño social que producen los delitos por los que principalmente se encarcela a las mujeres en el sistema federal y el castigo al que son sometidas", se indica.La relación entre la mujer y el delito, a partir del incremento de la población femenina en las cárceles, ha empezado a ser estudiada con mayor profundidad por los expertos policiales y judiciales.Por otro lado, el sistema penitenciario está obligado a adaptarse al nuevo fenómeno, acondicionando sus instalaciones para albergar a las reclusas.