Pie diabético, una complicación olvidada
Cada 30 segundos se realiza en algún lugar del mundo una amputación como consecuencia de la diabetes. Se estima que un 15 y un 25 por ciento de los pacientes con diabetes desarrollarán úlceras en algún momento de su vida; y de estos pacientes entre un 10 y un 30 por ciento sufrirá además una amputación. Según estadísticas de la Federación Internacional de Diabetes (IDF, según sus siglas en inglés) como consecuencia de la progresión de estas heridas, cada 30 segundos se produce en algún lugar del mundo una amputación a causa de la diabetes.La falta de control de los niveles elevados de azúcar en sangre característicos de la diabetes, produce un daño progresivo de los nervios y de los vasos sanguíneos de las piernas generando por un lado, lo que se denomina neuropatía diabética o una falta de sensibilidad en los miembros inferiores que favorece la aparición de lesiones; y por el otro lado, lo que se conoce como enfermedad vascular periférica o pie isquémico. En este estadio hay una pérdida de sensibilidad frente al dolor, al calor o al frío; entonces un simple corte o raspadura, heridas por contacto con temperaturas elevadas, la utilización de un calzado inapropiado o callos plantares no tratados son situaciones que por la falta de sensibilidad pasan inadvertidas y pueden dar lugar a la formación de heridas (traumatismo externo indoloro). Por otra parte, la enfermedad vascular periférica o pie isquémico se produce como consecuencia de una mala circulación y/o disminución del flujo sanguíneo en los miembros inferiores, lo que impide la cicatrización y por consiguiente la curación de llagas o infecciones. Complicaciones muy gravesAmbas problemáticas se potencian y pueden generar serias dificultades en las extremidades del diabético, hasta llegar incluso a una gangrena. Si se llega a este punto, para evitar que se extienda y corra peligro la vida del paciente, en muchos casos el tratamiento habitual consiste en extirpar quirúrgicamente el dedo del pie, el pie y, en ocasiones, hasta parte de la pierna. Las estadísticas epidemiológicas indican que cada día se realizan, en instituciones de salud de la Argentina, 19 amputaciones, incluyendo dedos, pies o parte de las piernas. La mayoría de estas cruentas operaciones ocurren como resultado de lesiones por pie diabético.La morbi-mortalidad es sumamente alta, es por eso que en la actualidad, el pie diabético en sí, se toma como un factor de riesgo cardiovascular alto. De los pacientes amputados el 85 por ciento tuvieron antecedentes de lesiones previas, por lo que el sólo hecho de tener o haber tenido una lesión implica que el paciente ya debe ser considerado de alto riesgo cardiovascular. De una buena revisaciónToda persona con diabetes debería controlar, al menos una vez por año, el estado de sus pies. El examen es mínimo, indoloro y se puede realizar en aproximadamente 30 minutos. Muchas veces en el control médico de rutina, sólo se hace hincapié en revisar los niveles de glucemia del paciente y hay que destacar la importancia que tiene revisar a fondo sus pies para evitar lesiones y prevenir a tiempo complicaciones graves. Esto debería ser un detalle central del control periódico de un paciente diabético. Cerca del 85 por ciento de todos los problemas relacionados con el pie diabético podrían evitarse mediante una combinación de buenos cuidados podológicos y educación adecuada, tanto para personas con diabetes como para los profesionales sanitarios que las atienden. El tratamiento temprano y adecuado de las úlceras por equipos multidiciplinarios, especializados en este tipo de pacientes, es uno de los factores clave para evitar llegar a situaciones graves que requieran la amputación. Nuevos tratamientosEn los últimos años se han desarrollado innumerables herramientas para tratar de manera rápida y selectiva cualquier herida, y mejorar las posibilidades de recuperación y fundamentalmente evitar las amputaciones; sin embargo un gran número de pacientes ya sea por el tamaño de la lesión o por la falta de cuidado o diagnóstico correcto deben someterse a una amputación. Toda lesión, sobre todo en el paciente con pie diabético, demora mucho tiempo en cicatrizar por lo que es mayor la posibilidad de infección y por lo tanto mayor también la probabilidad de amputaciones.La aplicación del Factor de Crecimiento Epidérmico en la úlcera ha demostrado una alta efectividad en la recuperación de pacientes que habiendo probado otras terapias no tenían muchas más opciones de tratamiento disponibles que la amputación. El factor de crecimiento epidérmico estimula la formación de tejido de granulación útil, así como la llamada angiogénesis que implica la formación de nuevos vasos sanguíneos. Esto permite promover el rápido cierre de la lesión en pacientes diabéticos, que por su misma enfermedad, tienen dificultad para cicatrizar sus heridas y evitar de esta forma la amputación en un alto porcentaje de los pacientes con lesiones profundas que, en muchos casos, eran resistentes al tratamiento convencional. APUNTEConsejos Generales para evitar el pie diabético:Todas las noches tomar un baño de pies con agua templada. Secarlos por completo suavemente, especialmente entre los dedos, usando una toalla absorbente y blanda.Una a tres veces por semana, aplicar a los pies después del baño alguna crema en base a lanolina para mantener la piel suave. Sustituir la lanolina por alcohol si la epidermis se ablanda demasiado.Al cortar las uñas no dejar puntas irregulares, no cortar la cutícula, tomar precauciones para evitar que un mal corte lastime los pies. De ser posible concurrir a un podólogo.Evitar aplicar en los pies medicamentos irritantes, especialmente tintura de yodo y preparados comerciales usados para extirpar callos y juanetes.Las callosidades deben ser cortadas y tratadas por profesionales, que tengan en cuenta las correctas condiciones de antisepsia.Aplicar una vez a la semana talco en pies y calzado.Elegir calzado cómodo, de material blando, de manera de no producir roces, y evitar de esta forma la aparición de heridas o ampollasAblandar el calzado nuevo en forma gradual (comenzar usándolo 1 hora por día).Evitar el contacto directo de los pies con el suelo. No aplicar directamente sobre los pies bolsas de agua caliente.Evitar el uso de medias gruesas, con costuras o apretadas. No colocarse medias si están húmedas. Si desea realizar caminatas extensas, ponerse algún tipo de crema neutra (lanolina) en los dedos.Realizarse una vez al año un examen: sensitivo, vascular y ortopédico, para evaluar el riesgo de padecer lesiones.
ESTE CONTENIDO COMPLETO ES SOLO PARA SUSCRIPTORES
ACCEDÉ A ÉSTE Y A TODOS LOS CONTENIDOS EXCLUSIVOSSuscribite y empezá a disfrutar de todos los beneficios
Este contenido no está abierto a comentarios