EDITORIAL
El sueño de una biblioteca universal ya es realidad
El sueño del escritor Jorge Luis Borges de que existiera una biblioteca universal se ha concretado hace un tiempo gracias a la nueva tecnología digital. Se trata de un sitio que pone a disposición del público importante material cultural de todos los países en forma gratuita, multilingüe y de fácil acceso.
La Biblioteca Digital Mundial (World Digital Library –WDL-) arrancó en 2017 y el enlace a la versión en español es https://www.wdl.org/es/. Fue creada por la UNESCO (Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura) y la Biblioteca del Congreso de Estados Unidos. El escritor argentino Jorge Luis Borges imaginó en 1939 un emprendimiento similar en la ficción, al que llamó “La Biblioteca de Babel”. En ese cuento se describe un universo configurado por infinitos espacios, en forma de hexágonos, en galerías, cada uno con una determinada cantidad de libros. Es una biblioteca eterna que ha existido antes que todo y existirá por siempre, en ella hay una vasta cantidad de libros uno por cada ejemplar escrito y por escribirse, en ella los bibliotecarios son obras de los dioses, o de la suerte. Ahora las nuevas tecnologías han hecho posible que se encamine el sueño borgeano, a partir de una iniciativa del bibliotecario norteamericano James H. Billington, quien le propuso a la UNESCO la creación de una biblioteca internacional. La Biblioteca Digital Mundial (BDM) se centra en materiales fundamentales relevantes, incluyendo manuscritos, mapas, libros poco comunes, partituras musicales, grabaciones, películas, grabados, fotografías, dibujos arquitectónicos y otras fuentes primarias. Uno de los objetivos de la Biblioteca Digital Mundial será trabajar estrechamente con el programa de la UNESCO “Memoria del mundo”, para hacer accesibles al público las versiones digitales de estas colecciones. Aunque el propósito es que el material esté en todos los idiomas y alfabetos, por ahora se encuentra disponible en español, inglés, francés, portugués, ruso, árabe y chino. Los objetivos de la biblioteca universal se vinculan con promover el entendimiento internacional e intercultural y ampliar la cantidad y la variedad de contenidos culturales en Internet. Por otro lado, se busca facilitar recursos a los educadores, estudiosos y al público en general. Y permitir a las instituciones asociadas reducir la distancia digital dentro de y entre los países. Cualquiera que sienta interés por conocer (educadores, estudiosos y público en general) puede realizar sus búsquedas entre los 16.081 artículos cargados sobre 193 países en el período comprendido entre 8000 a.C. y 2000. La BDM contempla que pueden asociarse a ella bibliotecas, archivos, museos y otras instituciones interesadas en el rescate de la riqueza cultural del hombre, proveniente de cualquier país. “Se necesitan socios con colecciones interesantes y de relevancia cultural y capacidad de digitalización, para expandir y diversificar el sitio”, se lee en la página web de la Biblioteca Digital Mundial. Como parte de la idea de difundir la riqueza y la diversidad de las culturas del mundo, la BDM ofrece, además de una extensa colección de obras seculares, una amplia gama de libros sagrados de las principales religiones universales. Cabe consignar que el sitio de la Biblioteca Digital Mundial está alojado en la Biblioteca del Congreso de Estados Unidos
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